El Gobierno de España declarará Lugar de Memoria el Puente Avenida de Irun en los próximos meses

El Gobierno de España declarará Lugar de Memoria el Puente Avenida de Irun en los próximos meses

08/05/2024

  • Marisol Garmendia confirma la calificación del emblemático enclave fronterizo durante la conmemoración del Día del Exilio Republicano Español

 

“El Puente Avenida de Irun tendrá la consideración de lugar de memoria”. Así lo ha señalado la delegada del Gobierno en el País Vasco, Marisol Garmendia, durante la conmemoración del Día del Exilio Republicano en el emblemático paso fronterizo. Un homenaje en la que ha también ha intervenido la alcaldesa de Irun, Cristina Laborda. Este enclave será confirmado en los próximos meses como Lugar de Memoria para unirse a una lista de la que por ahora forma parte Gernika-Lumo en Euskadi. En estudio hay otros enclaves como la iglesia de San Francisco de Asís de Vitoria donde se alojará el futuro Memorial 3 de Marzo, y la plaza de Unzaga y la Casa Consistorial de Eibar (donde se proclamó la II República).  La declaración es una de las herramientas que recoge la ley de Memoria Democrática para señalar aquellos espacios de especial relevancia histórica vinculados la lucha por las libertades con una función “conmemorativa, de homenaje, didáctica y reparadora”.

“El año pasado, el Ayuntamiento de Irun solicitó al Gobierno de España la declaración del puente como Lugar de Memoria. Y hoy puedo anunciar que efectivamente así va a ser, aunque para el anuncio oficial aún quedan algunos meses, el tiempo necesario para rematar todos los trámites administrativos. Pero la decisión ya está tomada por parte del Gobierno español”, ha anunciado Marisol Garmendia en el acto organizado por la Delegación del Gobierno en el País Vasco y el Ayuntamiento de Irun. Entre las autoridades que han acudido  al acto figuran el viceconsejero de Derechos Humanos, Memoria y Cooperación del Gobierno Vasco, José Antonio Rodríguez Ranz; el Ararteko Manuel

Lezertua; la directora del Instituto Gogora, Aintzane Ezenarro; el teniente de diputado y diputado de Sostenibilidad de Gipuzkoa, José Ignacio Asensio, y la diputada de Movilidad, Turismo y Ordenación del Territorio de Gipuzkoa, Azahara Domínguez, así como representantes de las asociaciones memorialistas.

Marisol Garmendia ha recordado que el homenaje a las víctimas del exilio republicano español se produce en el Puente Avenida porque “el 4 de septiembre de 1936, miles de iruneses cruzaron con sus enseres este puente hacia Francia para escapar de la Guerra Civil y luego de la dictadura franquista. En este mismo paso sobre el río Bidasoa, la Gestapo entregó a las autoridades franquistas a Lluís Companys, presidente de la Generalitat de Cataluña, posteriormente fusilado”.

Por su parte, la alcaldesa de Irun, Cristina Laborda, ha querido mostrar también su empatía con aquellos exiliados. “Hoy es día de recordar y sobre todo, de reivindicar la lucha de tantas personas que tuvieron que huir por defender valores como la libertad y la democracia. Nos encontramos en un lugar muy especial y muy adecuado precisamente para visibilizar la fortaleza de la unión. Por este puente huyeron cientos de personas creando una separación física y simbólica”.

El Puente Avenida ha cambiado con los años su razón de ser y hoy constituye un elemento de unión, como ha remarcado Laborda. “Este Puente Avenida es Un lugar especial, lleno de historia y de historias. Pero ha dejado de ser un elemento de separación y a través de él nos da la oportunidad conectar y unir nuestro territorio, y por supuesto, a las personas”.

La delegada del Gobierno, la alcaldesa de Irun y el resto de autoridades han realizado una ofrenda floral en la placa conmemorativa de las víctimas del exilio antes de visitar el centro de interpretación que se encuentra en las inmediaciones.

“El exilio siempre es algo terrible”, ha afirmado Marisol Garmendia durante su intervención. “Mientras estamos aquí, muchas personas están en este momento abandonando a la fuerza su patria para irse a otra parte huyendo de las

hambrunas, guerras y violencias. Y recordemos que eso fue, en algún momento, lo que les pasó a los españoles que fueron perseguidos y acosados por la Dictadura y la Guerra Civil, la página más negra de nuestra historia”, ha rememorado.

 

Lecciones del pasado

La delegada del Gobierno ha invitado a los asistentes a extraer lecciones del pasado para construir un presente y un futuro más solidarios. “Muchos de los exiliados fueron acogidos con cariño y solidaridad por los países a los que tuvieron que emigrar. Otros, sin embargo, sufrieron el desprecio y la falta de comprensión de aquellos que los veían con los ojos del racismo, como meros intrusos que les iban a arrebatar trabajo y derechos. Por eso es tan importante recordar la importancia de ayudar a los exiliados. Y más ahora que vivimos tiempos en los que renace la xenofobia y surgen brotes de insolidaridad sobre todo desde la derecha y la extrema derecha. El recuerdo de aquellos exiliados debe reforzar en nosotros la empatía con los más necesitados”, ha afirmado.

Garmendia ha defendido la necesidad de aclarar el pasado para construir el futuro. La delegada del Gobierno ha reivindicado la política desarrollada en este sentido por el Gobierno español. “El Gobierno que preside Pedro Sánchez quiere recuperar la memoria del exilio republicano para España. Y prueba de ello es la Ley de Memoria Democrática, la demostración de que el Estado rinde homenaje al exilio y hace todo lo posible para darlo a conocer entre los españoles con una visión reparadora, inclusiva y plural. La concordia merece estar basada en la memoria y no en el olvido”.

Esta estrategia, la del olvido, ha merecido la censura de Marisol Garmendia al recordar las políticas aplicadas por la derecha y la extrema derecha. “Ahora estamos viendo como algunas comunidades gobernadas por el Partido Popular y por Vox se inventan una ‘ley de Concordia’ basada en una visión mistificadora de la historia de España en el periodo de 1931 a 1978. En realidad, es un intento de desvirtuar las políticas de memoria democrática actualmente vigentes, a la vez que emborronar la República, que con todos sus defectos y errores es la experiencia democrática más importante que podemos contemplar al mirar nuestro pasado. Hasta la ONU se ha revuelto contra estas ‘leyes de concordia’ y alerta sobre el negacionismo”, ha criticado.

Para la delegada del Gobierno, la línea a seguir es otra bien distinta. “En este momento de la historia tenemos la oportunidad y la responsabilidad de trabajar para hacer frente a los intolerantes y comprometernos con el Nunca Más”, ha finalizado.